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Aunque en sus comienzos nunca se les pasó por la cabeza ser amigos, hoy los une una sólida amistad, además de un atractivo y talento que los ha encumbrado a lo más alto de Hollywood.
Todo empezó en los 90, cuando un joven llamado George Clooney audicionó para un rol de “Thelma y Louise” (1991), con Susan Sarandon y Geena Davis. Pero todo se desmoronó al enterarse que un tal Brad Pitt le había arrebatado el papel: “Estaba tan molesto con este tipo, que pasaron muchos años antes de que viera la película”, confesó el galán de la recordada serie “ER” (1994-2009).
Por otro lado, ese tal Brad puso atención a la existencia de Clooney, recién después de la muerte de la Princesa Diana de Gales en París, en 1997, cuando habló del peligro que se corría en Hollywood por culpa de esos mismos paparazzi: “Lo sentí tan seguro, no como una estrellita más, sino como un verdadero líder. Y no me equivoqué”, contó el protagonista de “El club de la pelea” (1999).
El cine los obligaría a verse las caras 10 años después. Cuando el fallecido productor Jerry Weintraub, mánager y promotor de giras de Frank Sinatra y Paul Anka, quiso juntar a las celebridades más famosas, para conformar el reparto de lujo de lo que sería “La gran estafa” (2001). Sus preferencias tenían nombre y apellido: George Clooney y Brad Pitt, en una lista a la que también se sumaron otros como Matt Damon y Andy García. La complicidad entre los personajes principales, como la de sus intérpretes, fue inmediata. Así, repitieron en las siguientes secuelas: “La nueva gran estafa” (2004), y “Ahora son 13” (2007).
El dúo después trabajó en “Confesiones de una mente peligrosa” (2002), dirigida por Clooney, con Pitt en una pequeña intervención. Y también estelarizaron el filme de los hermanos Coen “Quémese después de leer” (2008). Pasaron 16 años para que trabajaran nuevamente juntos, prestando sus voces en la cinta “Amigos imaginarios” (2024) y en la comedia de acción “Lobos” (2024), disponible en Apple+.
SOCIOS Y AMIGOS
En su lazo, el cariño y el respeto es innegable. El moreno ha declarado sobre el rubio: “Él podría haber hecho cualquier personaje para lucir su cara bonita. No obstante, siempre se ha atrevido a más, demostrando su gran potencial hasta ahora”. Brad Pitt comenta por su parte: “Si no hubiese tenido a un George Clooney a mi lado, habría dejado muchas oportunidades. Cuando la vida se pone dura, él es el primero a quien llamo”.
Anecdóticamente, ambos se adjudicaron el título del Hombre Más Sexy del Mundo por la revista People. El primero lo hizo el año 1995, y el otro en 1997. “No importa lo que haga, él siempre será el ‘ex’ hombre más sexy. Yo le robé la corona”, bromea el cano.
Clooney de 63 años, y Pitt de 60, iniciaron su carrera en televisión a finales de los 80. Después de más de 3 décadas de trayectoria actoral, empezaron a producir sus trabajos. Cada uno ostenta 2 Óscar: George fue Mejor Actor Secundario por “Syriana” (2005), y en su calidad de productor, obtuvo el de Mejor Película por “Argo” (2012). Mientras que su amigo se llevó la estatuilla dorada por Mejor Película como productor de “12 años de esclavitud” (2013), y fue designado Mejor Actor Secundario por “Había una vez en Hollywood” (2019).
Con el paso del tiempo han dejado un poco de lado la actuación. Clooney -dueño de la productora Smokehouse Pictures que ha financiado un total de 49 películas- se siente pleno en la silla de cineasta, teniendo 12 títulos dirigidos. El ex de Angelina Jolie y Jennifer Aniston prefiere la producción. Con su compañía Plan B Entertainment, ha sacado adelante más de 80 importantes rodajes, entre ellos, “Infiltrados” (2006) y “Luz de luna” (2016), ganadores del Óscar a Mejor Película.
Más aún, “Lobos” fue una coproducción de las empresas de Clooney y Pitt, junto a Apple+, la que ya tendría secuela en carpeta, tras su buena acogida. Y por si fuera poco planean la cuarta entrega de la franquicia “La gran estafa”.
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